Culpables

Finalmente el veredicto de la aletargada comisión de justicia de nuestra “siempre bien ponderada” Federación, salió a la luz. “18 meses impedidos de representar al seleccionado patrio y una multa de 20 mil dólares, para cada uno de los cuatro implicados en el caso del bacanal patrio”. Esto, además de benevolente, no es más que un mero formalismo. Repasemos: Año y medio significan ocho partidos de la selección y veinte mil dólares, no es sino lo que gastaron en mujeres y licor, aquella sodómica noche en el hotel El Golf. Más que esta irrisoria y patética sanción --digna de una Federación con una rabo de paja tan grande como su desvergüenza--, esperemos que el Chemo, los sanciones con la separación tácita del proyecto Sudáfrica 2010 --o quien llegue en lugar del Chemo, si las cosas no caminan--. Volver a contar con estos jugadores luego de la sanción convertiría a Del Solar en un pusilánime y un sujeto sin palabra. Recordemos que el aseguró que fuera de la investigación de la federación, el desarrollaba su propia pesquisa y elaboraría su propio veredicto.

Esta sanción, si bien no es definitiva, fuera de la indulgencia con la que viene cargada, condena públicamente a los cuatro jugadores que menospreciaron el nombre de la selección, ridiculizaron el uniforme y demostraron el poco compromiso que tenían para disputar las Eliminatorias. Convirtieron su periplo por Sudamérica en unas vacaciones pagadas por los miles de peruanos que fuimos testigos de los constantes ridículos que hicieron dentro del terreno de juego.

Volver a contar con estos miserables, sería premiarlos con un perdón que no merecen, reconvocarlos constituiría un error tan grande como la coraza que protege a Pizarro quien aún asegura inocencia, o como el desparpajo de Mendoza cuando aseguró que él hace goles donde le pagan. Son estos tumores los que tenemos que extirpar del fútbol peruano, son estos comechados los que debemos erradicar del ámbito futbolístico nacional, y afrontar el resto de las eliminatorias con jugadores que realmente quieran jugar en nuestra selección, no figuritas de álbum, que, por mucho talento que puedan tener, no van a ser más que COBARDES.