Dicen que el fútbol moderno debe ser: directo, práctico, vertical, resultadista. Dicen que el fútbol antiguo fue: romántico, de toque improductivo, horizontal. Dicen que el fútbol moderno es rápido, contundente, efectivo. Dicen, dicen, dicen.......
Negar que el juego sufrió una mutación a lo largo de los años sería obtuso, no aceptar la “evolución” del deporte se convertiría en un acto intransigente y netamente obstinado. Pero fuera del aspecto etimológico que convierte la palabra evolución en avance, progreso, yendo a la práctica, es realmente toda clase de evolución positiva?. Es decir, esta tendencia mercantilista, altamente redituable en la que se está convirtiendo el fútbol es definitivamente un avance?.
Es cierto, tenemos clubes que gozan de una cuenta bancaria envidiable, la misma que les permite adquirir un sin numero de jugadores que convierten a sus equipos prácticamente en selecciones mundiales, pero, pregunto a raíz de esto, ¿es esa la esencia del fútbol? Una constelación de cracks ¿garantiza un espectáculo?, ¿garantiza un equipo?, de ser así, sin miedo a equivocarme, Brasil debería ser campeón del mundo cada cuatro años. El fútbol es más que nombres, el fútbol va mas allá de los millones de dólares invertidos, el fútbol tiene un alma, tiene una naturaleza, la misma que se perdió, cuando se convirtió en un banal negocio. Ser dirigente o adquirir un equipo de fútbol hoy es tan poético como ser dueño de una bodega ó tener una tienda para zurdos, simplemente se busca generar ganancias para los magnates que hoy manejan a los grandes equipos.
Hoy en el fútbol “evolucionado” no se contratan jugadores sino vendedores de camisetas. Hoy en el fútbol “evolucionado” no se busca jugar bien, sino ganar, cuando claramente estos dos términos deberían estar implícitos, uno en el otro. Hoy en el fútbol moderno no se rinde culto al talentoso sino al empeñoso. Hoy en el fútbol moderno no hay tiempo para las pausas, los cambios de lado, la huacha, el taco, estas son jugadas extrañas, atípicas, improductivas. Hoy el fútbol “evolucionado” busca el área en la menor cantidad de toques posibles, busca eficacia, aunque eso signifique matar la esencia del juego.
El fútbol evolucionó, cambió, mutó, pero realmente ¿mejoró?.
Negar que el juego sufrió una mutación a lo largo de los años sería obtuso, no aceptar la “evolución” del deporte se convertiría en un acto intransigente y netamente obstinado. Pero fuera del aspecto etimológico que convierte la palabra evolución en avance, progreso, yendo a la práctica, es realmente toda clase de evolución positiva?. Es decir, esta tendencia mercantilista, altamente redituable en la que se está convirtiendo el fútbol es definitivamente un avance?.
Es cierto, tenemos clubes que gozan de una cuenta bancaria envidiable, la misma que les permite adquirir un sin numero de jugadores que convierten a sus equipos prácticamente en selecciones mundiales, pero, pregunto a raíz de esto, ¿es esa la esencia del fútbol? Una constelación de cracks ¿garantiza un espectáculo?, ¿garantiza un equipo?, de ser así, sin miedo a equivocarme, Brasil debería ser campeón del mundo cada cuatro años. El fútbol es más que nombres, el fútbol va mas allá de los millones de dólares invertidos, el fútbol tiene un alma, tiene una naturaleza, la misma que se perdió, cuando se convirtió en un banal negocio. Ser dirigente o adquirir un equipo de fútbol hoy es tan poético como ser dueño de una bodega ó tener una tienda para zurdos, simplemente se busca generar ganancias para los magnates que hoy manejan a los grandes equipos.
Hoy en el fútbol “evolucionado” no se contratan jugadores sino vendedores de camisetas. Hoy en el fútbol “evolucionado” no se busca jugar bien, sino ganar, cuando claramente estos dos términos deberían estar implícitos, uno en el otro. Hoy en el fútbol moderno no se rinde culto al talentoso sino al empeñoso. Hoy en el fútbol moderno no hay tiempo para las pausas, los cambios de lado, la huacha, el taco, estas son jugadas extrañas, atípicas, improductivas. Hoy el fútbol “evolucionado” busca el área en la menor cantidad de toques posibles, busca eficacia, aunque eso signifique matar la esencia del juego.
El fútbol evolucionó, cambió, mutó, pero realmente ¿mejoró?.
1 comentario:
no se si mejoro, pero la television es un punto definitorio en esta discusion, la television convierte a los jugadores en estrellitas, la television es la que genera los millones, la television convirtio al futbol en un espectaculo tan pobre como la fedreacion de lucha, o en los supercapeones, el futbol romantico murio, la televisioon lo mato!
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