Sí. Es culpa de Chemo, por un exceso de confianza en su capacidad. En el fútbol no hay milagros y eso, José del Solar, lo debería tener muy claro.
Un D.T. se decanta por uno u otro equipo en busca de la gloria –y del dinero-.
Imaginemos a Medardo Arce en el 2001, dirigiendo al Juan Aurich. ¿Qué quería lograr Don Medardo como D.T. del Aurich? ¿Cuál era su objetivo? Definitivamente sólo pensaba en cobrar a fin de mes, y poder seguir en el puesto el mes siguiente. Pero yo sé que Medardo tenía un sueño recurrente: se veía campeón nacional, venciendo en la final a un grande de Lima, clasificar a la copa al equipo norteño, eliminar en semifinales a Boca en el Elías Aguirre con un golazo en el último minuto de Lino Morán. La final ya no la imaginaba. Era demasiado.
Medardo Arce, al igual que muchos entrenadores del medio local, aspiran a tener chamba fija y hacer una campaña decorosa, para que algún equipo se fije en ellos en la próxima temporada. Mosquera sabe que no puede ser campeón con el Muni. La gloria para él será clasificar a un torneo internacional. Él lo único que quiere es pagar las cuentas de la casa a fin de mes.
Ningún entrenador local aspira a tomar la selección nacional. No están preparados, y ellos lo saben. No se les pasa por la cabeza, jamás lo han soñado. Navarro o Uribe, que pasaron por la Videna, tampoco estaban preparados, pero se les presentó la Virgen y obviamente aceptaron con gusto: sólo por los dólares, porque eran muy concientes de que la gloria no la alcanzarían jamás: no había plantel y su capacidad para dirigir es muy pobre. Ya lo dijimos: en el fútbol no hay milagros.
¿Chemo del Solar está preparado para ser el D.T. de la selección? ¿Sólo porque estudió en España y porque es un hombre de fútbol? Del Solar no busca el dinero que le dan en la Videna. Chemo tiene el futuro asegurado, y el de sus hijos y el de sus nietos. Chemo busca la gloria: clasificar a Perú al mundial. No queremos meterlo en el mismo saco con Uribe, Navarro o el mismo Autuori: plata fácil, trabajando 3 o 4 días al mes. Chemo al menos proyecta otra imagen, que ya es bastante decir. ¿¿Pero habrá pensado realmente que podía clasificar al mundial?? ¿¿Confía demasiado en sus conocimientos como entrenador?? En un post anterior dijimos que las ilusiones para estar en Sudáfrica se empezarían a derrumbar –como se derrumbaron para Japón/Korea y para Alemania- en la quinta fecha, luego de perder con Colombia en Lima. Esta vez se adelantaron un poco: 3 fechas. Y no sólo se esfumó la ilusión del hincha, sino pregúntenle a De la Haza y a J.J. (Oré?? No, el bamba, Jayo Legario).
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